Actualmente los aparatos de aire acondicionado que tenemos en nuestras casas utilizan el gas R410A.
¿Qué es el gas R410A?
EL R410A es una mezcla de dos gases, el R32 y el R125. No se trata de un gas puro, por lo que dificulta su manejo y también su reciclaje y reutilización. Es un gas de alta seguridad aún en caso de producirse fugas. Clasificado como A1/A1, es decir, no tóxico y no inflamable.
Al ser uno de los llamados gases fluorados, no contribuye a la desaparición de la capa de ozono, pero tiene un inconveniente, un alto índice GWP (potencial de calentamiento global; que es la capacidad que distintos gases tienen para atrapar el calor en la atmósfera – efecto invernadero).
En el siguiente gráfico podemos ver el potencial de calentamiento global de varios gases.
Por este motivo, la nueva normativa de la Unión Europea, prevé la eliminación de los gases fluorados (entre los que incluye el R410A) antes del 31 de diciembre de 2021.
Y según el Reglamento (UE) nº 517/2014 del Parlamento Europeo y del consejo del 16 de abril de 2014 sobre los gases fluorados de efecto invernadero, se prohíbe su comercialización a partir del 1 de enero de 2025.
Como solución a todo esto, el nuevo gas R32 será el sustituto.
¿Qué es el gas R32?
El R32 se diferencia del R410A por ser un gas 100% puro, por lo que resulta más fácil su manejo y además se puede reciclar y reutilizar de forma más fácil. Al igual que el R410A no tiene impacto sobre la capa de ozono, pero a diferencia de este, el R32 tiene bajo potencial de calentamiento atmosférico (QWP)
Además el R32 no es tóxico y poco inflamable, lo que le hace más seguro en equipos domésticos. También cabe destacar que cuenta con una mayor eficiencia energética, consume menos energía con temperaturas exteriores extremas y tiene una capacidad de refrigeración superior a la del R410A.
¿Qué consecuencias tiene todo este cambio para el usuario final?
Si tenemos instalado en nuestro domicilio máquinas con R410A y necesitáramos una recarga de gas ( normalmente se debe a que hay una fuga por problemas en la instalación) , notaremos un incremento en el precio de la reparación. Esto es debido al impuesto sobre gases fluorados y la normativa europea F-Gas.
El impuesto sobre los gases fluorados se aprobó en 2013 (artículo 5 de la ley 16/2013), este impuesto se ha ido aplicando de manera progresiva desde 2014 , llegando al 100% en 2017.
A este impuesto hay que sumarle el precio del gas que impone cada fabricante. Este precio se incrementa debido a las restricciones según la normativa europea que limita las cuotas de gas que puede vender cada fabricante (de ahí que los vendedores incrementen el precio)
Este calendario programa una reducción gradual de los fluidos disponibles en el mercado en el 2015 hasta 2030. Las cantidades se reducirán al 21% en el 2030.
En este año 2018 se aplicará un nuevo recorte de casi 30% en las cuotas de gas lo que agravará más el problema y encarecerá el gas todavía más.
Recomendaciones para nuevas instalaciones
Si está pensando en hacer una nueva instalación de aire acondicionado, lo recomendable es poner equipos con en el nuevo gas R32, que serán más eficientes y más saludables para el planeta y también evita problemas ante futuras reparaciones.
El R32 también es menos costoso, ya que el impuesto de este gas en menor que el R410A.
Ya hay empresas de aires acondicionados , como es Terclima Canarias S.L. ,que ya ofrecen equipos con este gas, la tendencia es que dentro de unos años todos los equipos de aire acondicionado y bomba de calor tengan R32.
Dudas que pueden surgir al usuario
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¿Los equipos que usen R410A pueden usar el R32?
La respuesta es no, habrá que instalar equipos fabricados para trabajar con este gas. Aunque hay marcas que están fabricando unidades interiores (evaporadoras) duales, es decir, que se pueden usar tanto con el gas R410 como con el R32, lo que si habría que cambiar siempre es el la unidad exterior (compresor).
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¿Cuándo dejará de existir el R410A?
En 2025 todos los equipos deberán tener R32.
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¿Cómo afecta esta transición de gas a Canarias?
En Canarias es más difícil aún conseguir el gas, por la insularidad. Siempre bajo pedido.